Alberto Palatchi: nueva colección de bodas

Estos días hemos estado disparando con Xavi Gordo la nueva colección de novias de Alberto Palatchi, y aprovechando uno de los descansos hemos querido hablar con Alberto sobre su año sabático y como ha vuelto a la moda nupcial con una firma que lleva su nombre.

Alberto Palatchi Gallardo es el tercer miembro de la saga familiar en poner en marcha un negocio de moda, prácticamente un siglo después de que su abuelo paterno, Alberto Palatchi Bienveniste, iniciara la andadura con un pequeño negocio de bordados. El mismo que en 1964 fundó Pronovias, la firma que luego lideraría con éxito su padre Alberto Palatchi Ribera hasta que la vendió en 2017 al fondo de capital riesgo BC Partners.

Alberto Palatchi Gallardo, formado en Derecho, trabajo durante tres años en Pronovias donde fue responsable de estrategia y aplicación del plan de expansión comercial de la empresa en Estados Unidos. Trabajó también en la compañía internacional Pepsi hasta que llegó la pandemia y supuso un punto de inflexión. Quería emprender, dejo su trabajo en Pepsi y cursó un MBA por la escuela de negocios Insead (Instituto europeo de administración de negocios) de Fontainebleau (Francia). Donde se comenzó a germinar la idea de la firma nupcial Alberto Palatchi.

 

Alberto Palatchi lanza su propia marca de moda nupcial

 

– ¿Cómo empiezas esta nueva aventura en el mundo de la moda?

-Empecé a finales de 2021.  Antes de la pandemia estaba trabajando en Pepsi y en un momento dado sentí que quería un cambio. Siempre había querido emprender, entonces vi que la mejor manera de hacer un cambio era haciendo un MBA, que es un máster de Business Administration. Fui a una buena universidad, estudie mucho y me preparé y en este prceso de cambio, mientras estudiaba me inspiré bastante, recuperé la idea de emprender y en dónde podría estar mi camino. Pero lógicamente, esto es como casarte, que está muy bien que tengas ganas de casarte pero te hace falta una mujer, lo mismo pasa en los negocios, está muy bien que quieras emprender pero tiene que encontrar una buena idea. Siempre había tenido en la cabeza la ide de crear mi propia firma de vestidos de novia, ya lo había hecho, sabía cómo funcionaba, tenía el net works, y fue mientras estudiaba el máster, cuando se me abrieron los ojos del valor que todo eso tenía y se me fueron todas dudas al respecto. La decisión fue fácil. Acabe el máster. Y tan solo un mes después empecé de la manera más sencilla posible. Yendo al IKEA, comprando dos mesas, las puse en el sótano de casa, contraté a Amalia, la persona de producto.
Tenía que juntar 3 ejes, que eran producto, producción y comercialización. Y en una tarde lo puse todo en Solfa.  Vi que Amalia vendía, el proveedor se puso a trabajar conmigo y tenía dos agentes comerciales que se unirían al proyecto, por lo tanto, teniendo estas tres patas juntas, ya lo vi claro y tiré para delante hasta el día de hoy. Tampoco ha pasado mucho, pero bueno, ya somos una empresa que cuenta con 9 empleados y hemos superado el millón de facturación en pocos meses. Y bueno, ha resultado un proyecto muy interesante y que en el futuro puede estar muy bien.

 

– ¿Qué crees que puedes aportar de nuevo al sector?

-Para empezar, hay pocas empresas nuevas en el mundo de la moda nupcial, hay muchos Ateliers, pero siempre son proyectos pequeños, un proyecto con vocación de ser una marca comercial a nivel mundial, hoy en día, hay pocas.

El sector necesita a gente joven que quiera aportar nuevas ideas y un nuevo concepto de negocio dentro de la moda nupcial. Esencialmente nosotros lo que apuntamos como novedad es estar a medio camino entre atelier y marca comercial, es decir, tener cuidado tanto en nuestro producto, como nuestra imagen y nuestra comunicación, como pueden hacer algunas pequeñas firmas de moda nupcial que creo que son las que más han aportado a nivel de variedad. Pero luego tener y ofrecer la distribución y el servicio de una marca comercial. Creo que esto no existe, y nosotros lo podemos llegar a ser.

 

– ¿Explícanos cómo funciona el tema de las colecciones? ¿Cuántos vestidos se hacen al año?

– Esto es bastante sencillo, nosotros de momento solo tenemos una marca, y de esa marca solamente sale una colección pero que está dividida en dos temporadas: avance y primavera/verano. Avance se compone de unos 60 vestidos y primavera/verano de otros 60 vestidos. Además, se incluye una serie de “carry overs” que son los mejores vestidos del año anterior. Con lo que al final te puedes quedar con alrededor de unos 150 vestidos, en un año entero. Porque coges 30 del año anterior y creas 120 nuevos.

 

– ¿En qué te inspiras en cada colección?

– Bueno, cunado estructuramos una colección, tenemos que tener en cuenta que lo nuestro es moda nupcial y no es Alta Costura, que es como si empezases de cero. Nosotros partimos de determinadas bases y caminos que continuamos y en el que introducimos una parte de novedades. Por un lado, una cosa que a mí me inspira mucho en las colecciones es pues, las ventas. (Risas)

 

– Claro, es normal, es una empresa, al fin y al cabo. Es una empresa, a parte del sueño.

– Las ventas es una gran inspiración y vemos qué es lo que más ha funcionado en la temporada anterior. Y luego, a partir de ahí, intentamos continuar esos caminos.

 

– Claro, es lo que el mercado pide.

– Claro, lo que pasa que lo difícil es cuando empiezas de cero, que tienes que tomar muchos nuevos caminos, pero bueno, a partir del primer año vas viendo que es lo que está teniendo mejor implantación. Y entonces partimos de esa base.

Para buscar cosas nuevas, siempre al principio de una colección creamos lo que nosotros llamamos el “universo” que son las típicas imágenes de tableros por todos lados con fotos de revistas, bodas de famosos, vestidos de coctel que podrían ser interesantes como siluetas para pasar a novias, un popurrí un poco de todo, de actualidad.

Aunque ya te digo que somos bastante conservadores. El sector nupcial es muy conservador, por lo que no seremos nosotros los creadores de la falda cuadrada.

 

– ¿Vais a hacer desfile?

– Es posible que hagamos un desfile durante la Barcelona Bridal Week pero enfocado a prensa y para algún cliente importante, más que nada por un tema de comunicación.

 

– ¿Cómo es el proceso de producción dentro de la empresa?

-El proceso es bastante sencillo. Comienzas primero creando un plan de colección, solicitas tejidos al proveedor, creas un poco el popurrí o la idea de cómo va a ser la colección que viene y a partir de ahí se empieza a dibujar. Una vez dibujada se seleccionan los dibujos, y a partir de ahí se crea un pre-prototipo, que es como una maqueta del vestido. Después se hace una serie de mejoras y arreglos y cuando esté bien se pasa al prototipo dónde también se le puede hacer algún arreglo si fuera necesario. Se envía aquí. Haces los fittings, descartas unos, metes en colección otros, haces más arreglos si fuera necesario y una vez cerrada la colección se pasa a fotografiar. Una vez fotografiadas se les da las fotos a los comerciales y salen a vender. Nosotros producimos según pedido. A medida que empezamos a recibir pedidos los enviamos a producir. Normalmente hay un paso entremedio que la primera temporada hemos suprimido, que es el production xample de la talla 42, eso te permite ver si los vestidos tienen algún tipo de imperfección al aumentar la talla ya que ya que las prendas que se producen de muestra son la talla 36.
De todas las tallas, la 42 es la más vendida.

 

– ¿Qué es lo que más te gusta de tu trabajo?

-Uy, me gusta todo. Me gustan muchas cosas…pero yo creo que una cosa bonita de ser empresario es construir un mundo nuevo de la nada, juntar a personas, crear cosas, productos, historias, relaciones… ¿no?. Es como construir un pequeño mundo. Y eso es bonito, está muy bien. No te puedo decir una cosa u otra. Todo tiene su parte buena, me gusta el conjunto de todo. Si ves la foto desde arriba, hacer tu propio proyecto, ver que eres capaz de llevarlo adelante y sobreponerte a los obstáculos, pues todo eso es una cosa bonita.

 

– Última pregunta ¿Cómo te ves en diez años?

– A ver en diez años, …es que sabes lo que pasa, si hace un año me hubieran preguntado donde me veía en un año y estar aquí en un estudio de fotografía contigo y con Xavi Gordo, no me lo hubiese creído…Te puedo decir hoy en día donde me gustaría verme en 10 años, con una empresa grande, exitosa, que represente los valores de mis empleados y los míos además de con una familia. Y siguiendo, escalando… es parte de mí.

 

– Pues muchas gracias!

– Gracias a ti.